Nada es más valioso que la paz. La paz es el punto de partida más básico para el progreso de la humanidad.
Una persona que se siente digna no es intachable, sino transparente; no busca aparentar, si no ser.
La solidaridad teje un red entre todas las personas que la practican y las hace mucho más fuertes.
La honestidad es una antorcha que iluminará nuestro camino hacia la verdad íntegra de nuestra vida.